Y que triunfe.
Es muy fácil, solo has de quitarte todo el orgullo, apartar tu talento y venderte a un producto barato.
Cuando estudié guión, me pusieron varias normas a seguir.
1- Cada frase es importante, ha de tener relevancia en la historia.
2- Si ocurre un acontecimiento importante y el espectador ya lo ha visto, no hace falta explicarlo en varias ocasiones. Ya que el espectador no es idiota.
3- Los personajes han de ser creíbles y tener una evolución lógica según los acontecimientos.
Para daros cuenta, coger cualquier serie o telenovela que den en televisión y observar, como toman al espectador como idiota, como van repitiendo el mismo acontecimiento en varias ocasiones y que los personajes son simples caricaturas sin personalidad.
Un ejemplo claro, sería que uno de los personajes pierde el trabajo, (en pantalla ves como lo despiden) vuelve a casa y se lo cuenta a la mujer, va a la habitación y se lo explica a su hijo, al día siguiente va al bar y se lo explica a un amigo, hasta que se enteran todos los personajes de la trama.
Es una manera muy buena de alargar series hasta la saciedad, lo malo, es que provoca una dependencia y luego al ver un producto mejor acabado, pierdes datos de la trama y no sabes de que va.
Pues nada, os recomiendo ver una serie como, La fea Bea donde se reflejan todas las características mencionadas, pero con moderación, que esa mierda engancha.
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