Clerks

Ópera prima de Kevin Smith, realizada con uno de los presupuestos más bajos de la historia del cine, con presupuesto de apenas US$27,575, que reunió de su fondo para la universidad, del seguro del coche de su amigo Jason Mewes, al ver que les faltaba algo de dinero tuvo que tirar de tarjetas de crédito, para llegar a pagar la película.

Fue rodada en 21 noches, que era cuando cerraban la tienda donde el trabajaba y pasa toda la trama.

Su trama es bien sencilla un día cualquiera en la vida de un empleado, algo depresivo, en una pequeña tienda de autoservicio, todo dará a cabo a una avalancha de veloces e irientes diálogos, que no dejan escapar.

Tras el éxito que tuvo en Sundance, le ofrecieron la distribución en cine, la película recaudó unos tres millones de dólares y eso que estaba en muy pocas salas.

Fue a Cannes donde tuvo, tres nominaciones en los Independent Spirit Awards.

Tras varios premios más, en la actualidad se ha convertido en una película de culto, está catalogada como la 16ª mejor comedia de todos los tiempos.

Como curiosidad, en el final de los créditos indican que los volveran a ver en Dogma, aunque tuvo que hacer otras antes de hacerla.