miércoles, 31 de octubre de 2007

Halloween

LA NOCHE DE LOS MUERTOS

La historia del Halloween se remonta a hace más de 2.500 años, cuando el año celta terminaba al final del verano, precisamente el día 31 de octubre de nuestro calendario.
Ese último día, se suponía que los espíritus podían salir de los cementerios y apoderarse de los cuerpos de los vivos para resucitar. Para evitarlo, los poblados celtas ensuciaban las casas y las "decoraban" con huesos, calaveras y demás cosas desagradables, de forma que los muertos pasaran de largo asustados. De ahí viene la tradición de decorar con motivos siniestros las casas en la actual víspera de todos los santos y también los disfraces. Es así pues una fiesta asociada a la venida de los dioses paganos a la vida.
En la cultura latina quedó impregnada, la iglesia romana al ver que era una fiesta pagana que no les reportaba capital, se la quedaron como fiesta suya, "El día de todos los santos" donde se daban donativos para encauzar a las almas por el buen camino.
La palabra Halloween es una derivación de la expresión inglesa All Hallow's Eve (Víspera del Día de los Santos).
En el cine ha influido mucho, ya por las varias partes de la conocida Halloween con Jamie Lee Curtis, Viernes 13, las innumerables películas de zombies, todo un festín para los aficionados.
Hoy os recomiendo pasar mucho miedo, ver unas películas con amigos, tomar algún dulce, beber un poco, disfrazaros y llamar a los espíritus ya que la puerta está noche está abierta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Como buen aficionado al cine d todos los tiempos, quiero expresar mi malestar por el boicot que está sufriendo el cine español a través del programa "Cine de Barrio", el cual parece ser sólo acordarse de "Manolos Escobares", "Carmen Sevillas", "Pacos Martínez Sorias" y "otros" cuya principal denominador común fue ser políticamente correctos con el régimen dictatorial que les tocó vivir. En dicho programa se deja de lado a quienes mostraron la auténtica realidad española: Bardem, Pajares, Esteso, Ozores...

Desde aquí un homenaje para todos ellos (sin minusvalorar a los primeramente citados)